Sevillano, miren al cielo.

Muchas veces lo he comentado, soy ateo, pero me encanta la Semana Santa de mi tierra. Hay gente que no lo llega a entender, pero mi forma de entender esta semana es distinta. Las marchas, los pasos, la forma de llevarlos, el arte, las figuras son dignas de admiración. Espero que el tiempo acompañe para todos y que cada uno disfrute de esta semana a su manera.

No hablo un mal castellano, si no un perfecto andaluz.

Este puente de Andalucía lo he pasado en Higuera de la Sierra y no he podido subir nada el 28 de Febrebro. Pero bueno, no tiene que ser 28 para decir lo orgulloso que me siento de ser andaluz, de mi tierra. Tambien me gustaría dar un toque de atención a esas nuevas sociedades andaluzas, a la que pertenezco. Decirles que nuestros abuelos, abuelas, padres y madres lucharon por una Andalucía libre y no podemos consentir que se nos prive de esa libertad.

¡Por los pueblos y la Humanidad!

¡Viva Cai!

Hace una semanas hice uno de los viajes que más he disfrutado, a la ciudad del Carnaval. Ciudad que expresa la libertad a través de una guitarra, una caja, un bombo y una voz. Ciudad bañada por un mar que te habla sin decirte nada. 

En esta foto podemos ver a una mujer, componente de una comparsa preparada para cantar en la Plaza de la Catedral.

Pasen de uno en uno.

Calles donde tocas las paredes si separas los brazos. Barrio Santa Cruz, antigua juderia de la Sevilla más mora.

Torre del Oro y al fondo la Giralda.

Iglesia de Santa Ana y azoteas trianeras.

Giralda desde la plaza del Altozano.